Lo cierto del caso es que el Comité Olímpico Internacional es claro con respecto a la lucha contra la discriminación en cualquiera de sus formas. De hecho uno de los argumentos del COI es que todos los atletas que forman parte de este evento mundial cumplen con las normas de elegibilidad y de inscripción de la competición, así como con todas las licencias médicas establecidas, razón por la cuál debe existir confianza en atletas, competición y la organización.

En este contexto, el COI señal que los casos de Imane Khelif y Lin Yu-Ting son muy polémicos, porque en el año 2023 ambas resultaron suspendidas por la Asociación Internacional de Boxeo. Sin embargo estas boxeadoras pasaron por rigurosas pruebas que validaron su participación para la actual cita olímpica. Ante este argumento, las dudas y reclamo de la boxeadora Angela Carini carece de fundamento legal como para buscar la descalificación de la argelina.

El pronunciamiento del Comité Olímpico Internacional asegura que: «Hemos visto en informes información engañosa sobre dos atletas femeninas que compiten en los Juegos Olímpicos de París 2024. Las dos atletas han estado compitiendo en competiciones internacionales de boxeo durante muchos años en la categoría femenina, incluidos los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, los Campeonatos Mundiales de la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) y los torneos sancionados por la IBA«.

Además, el COI asegura que la descalificación de ambas boxeadoras se ejerció mediante acciones arbitrarias de la IBA (Asociación Mundial de Boxeo), lo que se corrigió en el presente.