6 SEÑALES de que ALGUIEN TE ESTÁ HACIENDO MAL | Date cuenta de esto antes que sea demasiado tarde ver video al final
|Priorizarnos y buscar el propio bienestar y felicidad no nos convierte en egoístas, sobre todo si lo hacemos para alejarnos de aquellas personas que nos perjudican.
Algunas actividades, ambientes o personas llegan a ser perjudiciales para el propio bienestar. Pero ¿sabemos cómo alejarnos de aquello que nos hace daño? Esos estímulos nocivos nos cambian y alejan de lo que somos en realidad: individuos fuertes, valientes, libres y que, por supuesto, merecen felicidad.
Ahora bien, no es tan fácil distanciarse y romper de la noche a la mañana con todo aquello que vulnera nuestra autoestima. Aunque existen focos de riesgo evidentes (el fuego, algo punzante, un callejón oscuro y poco frecuentado por la noche, etc.), no siempre es tan sencillo identificar los peligros.
Es decir, a pesar de que el cerebro está programado para reconocer amenazas externas y activar la respuesta de huida, a veces resulta más complejo de lo que parece darnos la instrucción de escapar. Esto es así sobre todo en el terreno de las relaciones afectivas.
Como seres sociales, establecemos vínculos sólidos con diferentes personas. No obstante, en ocasiones algunas de ellas alteran, en cierto modo, el propio equilibrio y bienestar.
Es probable que pensemos que ‘quien nos hace daño no nos merece’. Sabemos que es fácil de decir, que en el fondo somos del todo conscientes de que quien no nos respeta no nos quiere de verdad. Pero ¿cómo llegar a admitirlo? ¿Cómo reaccionar?